Porque elegir un psicólogo es una decisión importante!

Cuento con más de veinticinco años de trabajo, estudio y una amplia experiencia internacional en España, Inglaterra, Francia, Suiza y EEUU; todo ello me ha dado una amplitud de miras y una mente abierta y exploradora, en constante enriquecimiento y aprendizaje.

Estoy convencida, y lo he experimentado en mí misma, de la importancia del trabajo interno personal para evolucionar y crecer como ser humano, logrando un contacto en armonía con la naturaleza y el entorno.

Para mí, es muy importante el abordaje integrativo de la persona a la que acompaño, teniendo en cuenta como partes de un todo las dimensiones psíquica, física, emocional, social y espiritual y respetando al máximo su unicidad. Todo ello, desde el trabajo presente, le permitirá movilizar sus recursos internos para iniciar su proceso de recuperación y sosiego futuros a través de la comprensión del pasado.

Mis clientes son adolescentes y jóvenes adultos, adultos, parejas, familias, estudiantes universitarios y grupos. Todos ellos disponen de un espacio acogedor en Friburgo abierto al diálogo, con el respeto máximo por la persona y sus sufrimientos y dilemas, para que cada cliente exponga libremente sus necesidades y comience así su exploración y conocimiento que le llevará a una vida plena.

Una Terapia basada en la evidencia…

Desde un enfoque Sistémico propongo un acompañamiento terapéutico o de crecimiento y evolución personal para todas las etapas vitales y crisis que las acompañan: vocación profesional, carrera, trabajo, pareja, jubilación o retiro, así como a toda persona que precise atención para hacer frente a sus relaciones interpersonales y los desafíos que supone encarar las demandas de la vida cotidiana.

Trabajo desde los principios de la Psicología Positiva, es decir, a partir de las fortalezas de la persona, sus anhelos, sus objetivos y de los recursos internos que posee y que quizá aún no ha descubierto, con especial atención a las maravillosas capacidades del ser humano de amor, resiliencia, valentía y autoconocimiento.

Desde un abordaje integrador, mis intervenciones van dirigidas a los problemas psicológicos y emocionales, pero también a los aspectos sociales y espirituales. Terapeuta y cliente trabajan en equipo para lograr transformar las relaciones difíciles de la persona, ampliando y reforzando sus capacidades de adaptación -aprendidas en la cultura, tradición y familia de origen- y remplazándolas por otras más adaptativas y eficaces.